Una visita protocolar fue la excusa ideal para que el líder se juntara con la tropa. En el predio de Ezeiza, junto a los miembros del Comité Ejecutivo de AFA y algunos presidentes invitados, Julio Grondona recibió a la princesa de Japón, Takamado, y al presidente de la Federación Japonesa de Fútbol, Ogura Jyunji. Todo muy lindo y emotivo, pero los directivos se retiraron con las caras largas. No se dijo ni una palabra de lo que querían escuchar. Por ahora, seguirá vigente la veda de hinchas visitantes. Y no hubo mayores precisiones sobre un incremento en los fondos que aporta el Gobierno por derechos televisivos.

"Hay que tener paciencia, muchachos. Por el momento, no se levantará la veda. Vamos a charlar, pero seguimos como estamos". Palabras más, palabras menos, ése fue el mensaje que recibieron los directivos en las últimas horas. Don Julio quiere, al menos, que se levante la sanción a los clubes de Primera.

Justamente en la máxima categoría se están generando los mayores problemas. Olimpo, que recibirá a Boca el domingo, decidió habilitar una tribuna para hinchas neutrales. Su valor será de $ 1.000. Belgrano hizo algo similar cuando el "xeneize" visitó Córdoba, y Godoy Gruz, cuando fue local contra River.

Algunos directivos cuestionaron la falta de soluciones. "Es la aceptación de la no existencia del Estado. Es como decir no podemos", disparó Mauricio Macri, ex presidente de Boca y socio político de Daniel Angelici, actual titular "xeneize". Matías Lammens, presidente de San Lorenzo, no fue tan crítico. "La solución no es impedir a los visitantes, porque la mayoría de los problemas surgieron entre facciones de la misma barra. Necesitamos el aval y el apoyo de los dirigentes estatales. Es un debete muy profundo que excede al fútbol", declaró.

"Jugamos sin público visitante porque no se puede controlar la violencia. Es insólito. Y eso es algo que la AFA y el Gobierno lo tienen que arreglar, no los clubes", se quejó Daniel Passarella. El presidente de River fue mucho más allá: "estimo que esto mejorará el año que viene y, si no mejora, el fútbol se muere".

Y el peligro de muerte mucho tiene que ver con la crisis económica que viven los clubes. Aún esperan que el Fútbol Para Todos incremente el monto de dinero por derechos televisivos.

El sistema se puso en marcha en agosto de 2009. Allí, la AFA rompió el contrato con TyC Sports a cambio de $ 600 millones. Hasta ahí todo bien, pero el Gobierno nacional, por el momento, sigue sin cumplir el contrato, que establece un reajuste anual.

Según el contrato, cada 12 meses, el monto debe ser reactualizado por el Valor Básico de Referencia (VBR). El canon se modificó una vez: en noviembre de 2011 pasó a $ 825, pero nunca más se lo tocó.

Los técnicos aseguran que ese índice, hasta marzo de 2013, llegó al 70 %. Es decir, que los fondos tendrían que haber superado los $ 1.000. Pero de reactualización, por el momento, nadie dice una palabra.